Aspectos positivos: excelente calidad del material (acero inoxidable), resistencia estructural, sistema de recarga simple y seguro (gracias a las esponjas es imposible sacar el alcohol de los quemadores), instrucciones de uso claras y precisas, diseño compacto y elegante. . En comparación con el gas, es un sistema mucho más simple y seguro: sin riesgo de fugas incontrolables, sin grifos para abrir y cerrar, sin necesidad de controles continuos en tuberías, accesorios, etc. Por último, sin cilindros se ahorra mucho espacio, solo una lata pequeña de alcohol rosa muy común que se puede comprar de vez en cuando en cualquier supermercado, sin necesidad de abastecerse. Inmediato y muy fácil de usar, se enciende como si fuera una estufa de casa normal. La única diferencia: el mechero debe ser largo (como un lanzallamas) y para encenderlo hay que insertarlo en lugar de acercarlo (hay aberturas en el único fuego que se hacen a propósito). Gas, pero es un aspecto irrelevante, ampliamente compensado por mayor sencillez y seguridad.